Si eres aficionado al rafting en Madrid o quieres empezar a practicar este deporte tan emocionante, nosotros te vamos a aconsejar una serie de lugares en los que podrás bajar en balsa por ríos para que puedas disfrutar de una manera increíble de esta actividad al aire libre con la que podrás estar con tu familia o amigos o incluso conocer a gente nueva mientras vives una aventura en la naturaleza que no vas a olvidar fácilmente.
Aunque para poder disfrutar de los diferentes tramos de este río que se encuentra próximo a Málaga deberemos de realizar un camino en coche que puede durar un par de horas, es un lugar idílico para aquellas personas que han practicado alguna vez rafting y que desean conocer un río de clase II y III ya que cuenta con tramos increíblemente divertidos y muy excitantes en los que tendrás que poner a prueba tu habilidad. Saliendo temprano de Madrid no habrá problema para poder pasar el día en esta región y vivir una aventura que te brindará una gran cantidad de sensaciones que merecen la pena experimentar ya que, además de las diferentes dificultades, también vas a poder ver y sentir la Naturaleza como nunca antes la habías sentido, siendo los tramos bastante largos, pudiendo llegar a los 9 kilómetros.
Uno de los sitios más característicos si eres de Madrid para hacer rafting es en Gredos. Para poder disfrutar plenamente de esta experiencia, lo que debes hacer es bajar el río por los meses de octubre a junio, siendo más recomendable hacerlo en marzo, principalmente porque podrás ver todo el esplendor de la naturaleza, con mucha más vegetación, flores y con una sensación más mágica. A diferencia del anterior que te hemos analizado, se trata de un lugar para hacer rafting en Madrid que no es muy complicado, pensado sobre todo para ser usados sus tramos como iniciadores para aquellos que nunca han disfrutado de esta práctica. Puede ser practicada de manera completa, pudiendo durar aproximadamente 5 horas y con un recorrido de 19 kilómetros o elegir uno de sus tramos.
Para aquellas personas que quieran disfrutar de una experiencia inolvidable en plena Naturaleza, muy cerca de la capital y que aporta gran cantidad de tramos en los que puedes disfrutar según tu nivel en este deporte es el río Cabriel. Nos comentan los expertos en rafting en Madrid de Ruting que al existir diferentes tramos, toda la familia puede practicar rafting sin ningún problema, debiendo en todo momento, como exigencia, que sepan nadar para que no exista ningún riesgo en caso de vuelque de la balsa.
Este río tiene un encanto que nos ha parecido siempre como uno de los mejores, tanto para aquellos que se inician en la bajada de rápidos, como también para los que desean sentir la Naturaleza y hacer una actividad acuática en un río, ya que te aportará la frescura y aventura que tanto necesitas y que merecerá la pena realizar, queriendo volver de vez en cuando para aprovechar de sus tramos que cuentan con una duración de unas 3 horas.
Otro de los ríos que si tienes un fin de semana libre o unos días de vacaciones y quieres disfrutar de las actividades al aire libre es el rafting en el río Tajo en Cuenca. Te encontrarás con un lugar que, bien es cierto no supone muchas complicaciones para aquellas personas que han sentido ya la adrenalina de una bajada por el río Cabriel o por otras zonas las cuales son más rápidas. Sin embargo, practicar este deporte en el Alto Tajo es una experiencia que llega a tu interior, ya que podrás conectar rápidamente con la naturaleza, con los espacios verdes de tu país y sobre todo, disfrutar con los amigos o con la familia de una actividad que os va a unir y hará que sintáis una gran felicidad en vuestro interior.
A pesar de contar con diferentes niveles, cabe destacar que incluso los más altos no tienen gran comparación con otras Clase III que podemos encontrar cerca de Madrid o en el resto del territorio español.
Finalmente, queremos terminar en el Alto Ebro que, aunque como ocurre con el primer río que te hemos expuesto, tienes que tomar el coche durante un par de horas, levantándote por lo tanto temprano o incluso quedándote una noche a dormir, merece la pena porque la experiencia es tan enriquecedora y preciosa que cuando vuelvas a casa querrás repetir. Se trata de una zona en la que el caudal del río suele ser muy intenso, con gran cantidad de agua, aunque para la iniciación de los más pequeños también puede ser perfecta ya que cuenta con tramos más leves y con menor cantidad de agua. Lo mejor de todo es el paisaje que vas a disfrutar mientras viajas en la balsa.